Día de la madre

Hace bastante que no escribía, pero hoy me ha dado por escribir, y desarrollar todos esos proyectos que tenía en la cabeza.

Uno de estos proyectos, era el escribir algo decente para mi madre. Hacía tiempo que no estaba tan bien como estoy desde hace tiempo con ella.

Últimamente se ha notado un gran cambio en casa, en nuestras miradas cómplices y en nuestras sonrisas mutuas.

Sabes que en nuestra familia, nos unimos ante las adversidades, pero tú y yo, sin necesidad de ninguna adversidad estamos tan unidas como cuando era pequeñita y todas las noches me leías en la cama la historia de una silla voladora.

Si te soy sincera, echo de menos que me cuentes cuentos de princesas, pero sabemos como es la vida.

Pero bueno, la entrada se llama día de la madre y apenas he hablado de lo que pasó ese día. Me acuerdo que nada más despertarte te tenía semi-preparado el café y un regalo que en principio no era para ti, pero solo fue una mentirijita piadosa, y me alegró bastante que te gustara, aunque fuera un detallito.

Pero el día fue avanzando y yo estaba tan ilusionada, no solo porque era tu día, porque sabes que creo que el día de las madres debería ser siempre, porque no sólo un día estas ahí para mí, sino siempre y 24 horas al día, sino estaba ilusionada por el regalo que te estábamos haciendo Jonay y yo, un regalo que sabia que te encantaría y se que ahora más que nunca después de todo.

No hablemos de las otras cosas que pasaron ese día, cada una sabemos lo que pensaba la otra y esta todo correcto, hablemos de nuestras lágrimas al recordar fotos viejas, donde aparecíamos las dos, yo abrazada a tu pierna y tu acariciándome la cabeza.

Ahora que escribo recuerdo muchos más momentos, porque aunque nadie lo sepa, yo era y sigo siendo una niña de mamá, no me separaba de ella, y aunque me hiciera llorar con fotos, y con vestidos y lazos que no me gustaran, es mi madre y recuerdo más las horas que pasamos juntas, riendo, abrazadas o simplemente viendo una película, que las posibles regañinas que me pudiera echar por  no recoger mi cuarto.

Te Quiero     Mamá